Cada Navidad solemos descuidar los hábitos saludables de alimentación, no cabe duda, que nuestro organismo va a “sufrir” este aluvión de grasas, azucares, bebidas…al que durante estas fechas lo vamos a someter.
En Frutas Masol vamos a enfocar nuestro esfuerzo o mejor dicho atención al atención al postre y al desayuno del día después gracias a las mandarinas.
Las mandarinas son ricas en fibra, vitaminas A, B1, B2, B3, B6 y C. Su alto contenido en bromo favorece el sueño, que nos ayudará a descansar y recuperar las horas de sueño que tan necesarias son en estas épocas navideñas.
Una de las principales ventajas de las mandarinas es que aumenta la secreción de bilis, esto ayuda a la digestión de las grasas y eliminación de residuos tóxicos.
Si añadimos esta fruta al postre e incluso al desayuno del día siguiente, ayudará muchísimo a nuestro organismo a reponerse de los excesos que hemos tenido en el día anterior.
Además de los beneficios que nos aporta las mandarinas, tenemos que indicar que posee un alto contenido en agua y poca proporción en hidratos de carbono, ideal para incluir en una dieta sana y equilibrada, a la vez que favorece al sistema urinario al proporcionar su alto contenido en agua y a la eliminación de grasas en forma de orina.
Para los más pequeños, es una fruta ideal por su facilidad ala hora de pelarse, incluso por su aporte de calcio y fósforo, vitales para la formación de los huesos y dientes. También favorece a que los músculos tengan mejor flexibilidad, muy recomendado para niños y personas que realizan deporte con frecuencia.
Recomendaciones para su consumo.
- En Frutas Masol nos esforzamos mucho para que el consumo de toda nuestra fruta sea por parte de nuestros clientes en el menor tiempo posible, es decir, una vez cogidas del árbol en 24 h tenerla en casa para comerlas. Esto garantiza su sabor, frescura y propiedades.
- La piel de la mandarina no debe estar arrugada, esto es signo de que lleva bastante tiempo recolectada.
- El color no es un signo claro de su madurez, nos fijamos en olor. Un olor intenso y dulce nos está diciendo que su sabor es exquisito.
- Cuando la mandarina es muy pesada para su tamaño, lo más normal es que resulte muy jugosa.