No se puede discutir que, para el consumidor, disponer de todos los productos en cualquier sitio y en cualquier época del año, supone una gran comodidad. Pero esta opción -cada vez más presente en nuestros supermercados- tiene una cara oculta y una influencia negativa en cuanto a nuestro disfrute, en cuanto a la ecología y al medio ambiente y, no menos importante, en cuanto a nuestra salud atañe.
Y es que consumir alimentos de temporada (y más si esos alimentos son de proximidad) aporta muchos beneficios a nuestra nutrición. Además de contribuir al mantenimiento del medio ambiente.
Un alimento, una fruta o una verdura, de temporada es aquélla que ha completado su ciclo de desarrollo agrícola, ha alcanzado su madurez y su punto óptimo de consumo de una manera natural, en el árbol o en la mata. Sólo así se consigue que esta fruta o verdura tenga todas sus propiedades intactas. Y, lo que no es menos importante, el consumidor pueda disfrutar de todo su aroma, sabor, color y textura.
Para eso, también es fundamental que entre la recolección y el consumo pase el menor tiempo posible. Por eso, Frutas Masol pone tu pedido en casa a las 24 horas de haberlo realizado. Y es que está más que demostrado el hecho de que el almacenamiento y el transporte a larga distancia de los productos frescos implica una disminución de sus nutrientes y de muchos de sus componentes.
Y también por eso, Frutas Masol sólo ofrece productos de proximidad, cultivados en la Vega del Guadalquivir por productores y agricultores locales. Así, es fácil deducir que las frutas y verduras de temporada no sólo son más sanas, sino que están mucho más ricas.
Ésa son la razones para ofrecer a nuestros clientes productos de temporada. Y ésa es la razón de que no siempre tengamos todos los productos a su disposición: porque sólo ofrecemos aquéllos que han madurado de forma natural, son de proximidad y están en su punto óptimo de consumo.
Por eso, también varían -de un año a otro- las fechas en las que ofrecemos nuestros productos. La climatología, las lluvias, las temperaturas que hayan hecho durante el año influyen en cuándo comienza y cuándo termina la temporada de un determinado producto. Y de esa manera, según hayan sido las condiciones de humedad, calor, etc., la temporada de una fruta puede adelantarse o atrasarse respecto a otros años. Y, de la misma forma, durar más o durar menos.
Lo que sí es muy importante para Frutas Masol es siempre ofrecer un producto de la máxima calidad. Y si hay que retrasar el inicio de una campaña, se retrasa hasta que no se haya alcanzado el grado de maduración adecuado.
Pero los beneficios de consumir productos de temporada no sólo acaban ahí. Hacerlo, implica una apuesta decisiva por la economía local, por los pequeños productores y por una producción sostenible. Pero también, estamos evitando un derroche de energía y una mayor emisión de gases de efecto invernadero, ya que los productos no tienen que recorrerse medio mundo para llegar a su mesa.
Ésa es la apuesta de Frutas Masol: productos de temporada y de proximidad. Salud y el máximo sabor en cada una de nuestras frutas y verduras.